miércoles, 18 de mayo de 2016

Reseña: Penélope manda saludos de Marina Colasanti

Penélope manda saludos

Reseña: Penélope manda saludos de Marina Colasanti


Mi valoración: 5 de 5 estrellas


Cuentos y relatos inquietantes.


En una comunidad de intelectuales surge un misterio. Un gato recorre los corredores, deja ver su sombra, hace ruidos, protagoniza incidentes extraños y hasta tiene un nombre, Penélope. Sin embargo, no existe. O parece no existir. Penélope manda saludos es un libro de pequeños misterios. Pequeños porque son narrados de forma suave, sutil, elegante. Pequeños también, porque no nos damos cuenta del poder con que se infiltran en nuestro espíritu durante la lectura. Hasta que es demasiado tarde.


Las historias de Marina Colasanti, reunidas en este libro, están escritas con la sutileza característica de su estilo, “no hubo medianoche tenebrosa ni se escuchó el tictac de los relojes, como en las películas de terror” (como diría uno de los narradores de “En casa, de noche”), para poner énfasis en el miedo, cuando este aparece en escena. Su terror no asusta, de hecho. Lo realmente sorprendente es lo que se introduce dentro de nosotros, dejándonos atónitos.

Cada uno de estos cuentos nos invita a observar con atención la singularidad de los personajes. Pronto participamos de sus tribulaciones y, en algunos casos, hasta nos reconocemos en ellos. Todos los protagonistas de las historias viven acontecimientos asombrosos que nacen de situaciones de aparente normalidad.

Así, a partir de un momento trivial —el hombre del cuento “Alguien gana ese juego” es derrotado en una partida de dominó—, nos llenamos de resentimientos y trastornos que nos conducen a lo fantástico, que ya se ha adueñado de la historia. En “Un hombre tan extraño que...”, seguimos el desconcierto y el colapso experimentado por un extranjero que, al preferir no integrarse a los lugareños, termina por distanciarse, de tal modo que se aniquila: nadie lo reconoce y él mismo termina desconociendo su identidad y el mundo que lo rodea. Cuando otro personaje, también un hombre, encuentra un guante en la calle, nada extraño parece anunciarse. Se trata de un guante violeta. Presentimos que algo puede suceder, y así es: el hombre se prueba el guante y, a partir de ese momento, no logra quitárselo. Esta aberración violeta permanece en su mano, apretándolo, torturándolo, amenazando con acabar su vida. ¿Cómo resolverá la situación? Si la trama de este cuento es inusual, mucho más sorprendente es su desenlace.

Lo fantástico, entonces, brota de lo cotidiano, como si Marina Colasanti estuviera decidida a mostrarnos que la vida no tiene nada de corriente. Después de leer cada uno de sus cuentos, siempre queremos más. La originalidad con que la autora construye sus tramas misteriosas y la manera inquietante de narrar, que no se conforma con lo tradicional, convierten los cuentos de este libro en una rara oportunidad para que el lector afine su paladar literario. El texto de Marina se mueve con agilidad, disimulo y suavidad felinos, a la manera de Penélope, que, como en estos relatos, revela sus misterios dejando al lector desconcertado, además de encantado.

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